"A la gente le da miedo reconocer lo que está sucediendo, como pasó en el 31"

No estoy de acuerdo con estas palabras dichas por FJLS en la presentación de su libro “España y Libertad” en La Linterna de la COPE (no te lo pierdas).

No es cierto. La derecha está firme como nunca lo había estado y no desorientada y encogida, como entonces. Falta un líder a la altura de los votantes. El registrador que tenemos nos ha salido blando, sin empuje. Pero el morlaco que se ha hecho con el gobierno está empezando a cometer los típicos errores del exceso de confianza.

El vaciamiento de competencias nacionales a favor de los paisitos periféricos ha funcionado en Cataluña. Sin embargo, no puede funcionar en el caso de unas vascongadas que ya son de hecho como una nación. El conato de intento de entrega de la Comunidad Autónoma de Navarra -verdaderamente histórica- a ETA y al PNV es un paso insólito e imprudente que ha hecho reaccionar a los navarros ante el desaire.

"Navarros somos, navarros seremos y a los vascongados, por culo daremos". Esto, que se escribía en las paredes allá por los años de la Transición, ha vuelto a la primera línea de la actualidad política. Es un indicador incontestable del cambio de régimen acometido por zETAp, radical y a la vez velado.

La gente se da cuenta, pero hasta ahora solo ha reaccionado la derecha sin líder. Por eso sorprende el amago de entrega de Navarra, porque zETAp podría quedar en ridículo si trata de utilizar como moneda de cambio algo que no es suyo.

Tan aficionado a las batallitas de la Guerra Civil y se ha olvidado de que el Alzamiento empezó en Navarra…