La rebelión cívica llega a los partidos políticos

Las declaraciones a las que nos tiene acostumbrados el alcalde de Madrid suelen tener un color de traición a su partido.

Se dedica a financiar directa o indirectamente a quienes insultan al partido por el que ha sido electo y a quienes lo votan.

Financia proyectos que son ofensivos para la moral de la mayor parte de los votantes de su partido.

Sus constantes pullas, provocaciones y enfrentamientos con numerosos miembros de su partido, como Angel Acebes, Esperanza Aguirre y Mariano Rajoy, irritan a la formación política que lo propone, y a los votantes que lo sostienen.

Desde aquí siempre hemos sido críticos con Alberto Ruiz-Gallardón. Y otra vez nos ha vuelto a dar la razón: nuevamente vuelve a despacharse sobre el 11-M a favor de una instrucción sumarial vergonzosa.

Hace un abuso sinvergüenza de ese apoyo incondicional de aquellos que votan al PP, no porque él esté en las listas, sino A PESAR DE ÉL.

Y parece que las bases se le están rebelando: han surgido dos movimientos en internet, que día a día van sumando más adhesiones: Gallardon No y el Comando Tippex. Ambos abogan por no votar al alcalde en las próximas elecciones municipales de Madrid. Ambos sugieren el voto nulo, ya sea metiendo otra papeleta en el sobre, o tachando con tippex el nombre del susodicho.

Ambas agrupaciones de ciudadanos, que se definen como votantes del PP, han sido tachadas de ser submarinos socialistas para perjudicar al PP y facilitar el triunfo del pianista de Parada (si leen algunos de los comentarios que les han dejado, son de frenopático). Otros les acusan de ser falangistas o de Alternativa Española, con la intención de rascarle algún voto descontento al PP. Otros (en los medios de izquierda) directamente les acusan de ser creaciones del PP para conseguir el voto "progre" solidario con Gallardón.

Parece ser que abundan los miopes en España, incapacitados para ver que los votantes no son un coto de caza privado, ni servidores de la gleba atados de por vida a darle su voto a determinado partido político le pongan lo que le pongan por delante. Parece que algunos ven "conspiraciones" por todas partes -como el niño de El Sexto Sentido veía muertos- ya sea para destruir al PP por dentro como para conseguir más votos para el PP a través de triquiñuelas electoralistas.

Lo que parece que pocos alcanzan a ver es que la REBELIÓN CÍVICA es imparable, y de las masas inertes y fácilmente dominables se están empezando a desprender INDIVIDUOS que piensan por sí mismos, que deciden ejercer su LIBERTAD de elegir, y -sobre todo- que NO TIENEN MIEDO.