Encuentro de ¿titanes?

Cuando vi la foto esta mañana, no pude reprimir un escalofrío. Como si fueran dos titanes de la generación incierta, entrelazaban sus manos estos dos "titanes". Si, dos titanes. Porque titán es sinónimo de "gigante", y se puede ser gigantescamente miserable.

Y me quedé pensando: ¿quién será el engañado esta vez? ¿Ibarretxe, Zapatero? Y la única respuesta que encontré fue: el pueblo español.

Porque lo más probable es que de esta reunión salga una declaración pour la galerie de que zETAp dice NO al referendum, de que Ibarretxe dijo que nunca dijo que iba a celebrar un referendum, mientras en secreto discreto se pacta esperar hasta después de las elecciones, pare proseguir las negociaciones con ETA y hacer lo que "los vascos y las vascas quieran"...

Y me vino a la memoria entonces aquella historia de la mitología griega en que los titanes -celosos de Dionisio, porque iba a heredar el trono de Zeus- decidieron matarle y reclamar el trono para ellos. Para conseguirlo, decidieron atraer la atención del niño-dios pintándose las caras de blanco, y lo distrajeron con juguetes. Entonces, lo despedazaron, cocieron y asaron sus miembros, y se dieron un festín con ellos. Zeus, enfurecido, castigó a los Titanes fulminándolos con sus rayos. Atenea pudo rescatar el corazón todavía latente de Dionisio y guardarlo, para entregárselo a Zeus, que hizo a partir de él a un nuevo Dionisio.

A veces la mitología se parece demasiado a la realidad. Sobre todo si cambiamos a Dionisio por España, a las caras pintadas y juguetes por memoria histórica y educación para la ciudadanía y a los titanes por zETAp, Ibarretxe, Carod y toda la patulea nazionalista...

De más está decir que Atenea es el PP... Y Zeus deberíamos ser TODOS los españoles.