El show de las "siniestras" y la bruja mala
Y Eduardo Zaplana, en las habituales sesiones control al Gobierno en el Congreso todos los miércoles -que por cierto ponen tan nerviosos a los miembros del desgobierno zapateril-, tuvo la "osadía" de hacerle preguntas sobre el Estatuto, que la Vice Vogue siempre se dedicó a no contestar.
Ante el cansancio repetido -imaginamos que hartazgo a estas alturas- frente a la misma actitud, nuestro Eduardo se atrevió a espetarle: "Cuánto ganaría la Cámara si usted, que es tan aficionada a disfrazarse de vez en cuando, un día, aunque sólo fuera un día, se vistiera de vicepresidenta del Gobierno y cumpliera con su obligación de responder a las preguntas de la oposición".
Alli fue cuando las diputadas de la siniestra comenzaron a gritar como posesas, y don Marín le hizo la regañina de todos los miércoles. Edu dijo que no creía haber cometido ningún exceso. Desde luego que no lo hizo. Y entonces, las siniestras diputadas -haciéndose las ofendidas con Zaplana- se retiraron del hemiciclo, acompañadas por el charneguísimo ministro de los 6 millones -Pepe Montilla- sin hacerle asco al empleadillo a sueldo de la Caixa.
Aquí comienza el show de Maritere.
Después de lanzar lacrimógenas consignas acerca de sentirse honrada de representar a Expaña con las africanas, y de decir que prefiere esas imágenes a la foto de las Azores (lástima que a España le iba mucho mejor en la foto de las Azores que en las de Maputo), ls siniestras regresaron en medio de un gran aplauso.
Y allí comenzó con la habitual retahilla de insultos que le dedica todos los miércoles a Rajoy, Acebes, y en este caso, a Zaplana. Por su piquito de oro soltó que "no sé si es un problema de ignorancia, que sería excusable, maledicencia, que sería intolerable, o machismo, que sería detestable, me temo que son las tres cosas juntas".
De más está decir que las "siniestras ofendidas" ovacionaron los insultos de la Vice Vogue al portavoz del PP.
No faltaron tampoco las referencias al apoyo del PP a "una guerra injusta e inmoral": "Me quedo con la política exterior de priorizar África y sus mujeres (antes) que (con) la de apoyar una guerra inmoral e injusta".
Mientras tanto, Zaplana intentaba preguntar sobre la tramitación del estatuto. Infructuosamente intentaba preguntarle a la ViceVogue "si le parece razonable, si en su opinión el estatuto tendrá un plazo de vigencia como dice el presidente, o si tiene fecha de caducidad como dice Artur Mas".
Pero De la Vega estaba en otra cosa: su disfraz y el paripé de las diputadas "siniestras. No se trata de contestar preguntas en la sesión de control, sino de montar un circo de tres pistas para entretener al populacho y tratar de dejar en ridículo a la oposición. Tal vez Maritere esté planeando otra excursión por tierras salvajes y ya las siniestras se hayan apuntado a la comitiva oficial de la Vice. Ya sabemos como mola el turismo exótico. Y ya vimos que a la Vice le va la marcha.
Total, nosotros somos los paganini de esta historia...
Nota: a Carmen Alborch (y a varias más) le sienta mejor el disfraz de africana, que los modelitos de la Benarroch... tendrían que pensar en quedarse por las Africas... no? España estaría mucho mejor, sin duda.
1 Comments:
si yo fuera mujer estaría furiosa contra estas individuas.
No hacen más que confirmar las teorías machistas (que por supuesto NO comparto) de que son seres inferiores al hombre.
Publicar un comentario
<< Home