De Rosas Blancas, rosas rojas y capullos
A principios de los años '40, en la Alemania nazi, dos hermanos - Hans y Sophie Scholl- formaron junto a un pequeño grupo de estudiantes, un movimiento de resistencia contra el nazismo que se llamó "La Rosa Blanca". Estos jóvenes, que habían formado parte de las organizaciones juveniles nazis, pronto se dieron cuenta de la maldad intrínseca del régimen hitleriano, y decidieron dedicar sus esfuerzos a abrirles los ojos a sus compatriotas.
Su lucha consistió en escribir y distribuir 6 panfletos, en los que decían cosas como "Cada palabra que sale de la boca de Hitler es una mentira. Cuando dice paz, quiere decir guerra, y cuando blasfema usando el nombre del Altísimo, en realidad se refiere al poder del mal....". También se preguntaban "¿que está haciendo el pueblo alemán? No verán y no escucharán. Siguen ciegamente a quienes lo seducen llevándolo a la ruina. ¡La victoria a cualquier precio! está escrito en sus pancartas...". Si cambiamos Hitler por Zapatero, alemán por español, y victoria por paz, podría haber sido escrito ayer en Portugalete o Lavapiés.
Eran jóvenes con un alto sentido del honor y un gran amor por su país. Distribuyendo los panfletos en la Universidad de Munich, fueron delatados por un conserje que era miembro del partido nazi. Llevados a jucio por "alta traición", fueron condenados a morir decapitados en 1943. Cinco estudiantes veinteañeros y un profesor de filosofía prefirieron perder la vida antes que doblegarse ante la tiranía de un régimen perverso y opresor.
Con la caída del nazismo, la "Rosa Blanca" comenzó a ser un símbolo de oposición a la tiranía en Alemania.
A más de 60 años de que aquellos héroes dieran sus vidas por la causa de la libertad y la justicia, vemos como un grupo de capullos españoles usurpan el símbolo de la Rosa Blanca para conmemorar el "alto el fuego" de ETA, siempre y cuando el estado de derecho se rinda a sus exigencias. Y para festejarlo, reparten rosas blancas.
No importan los 1000 asesinados, los miles de heridos y mutilados que tiñen de rojo y de muerte a las inocentes flores.
Los euskonazis que asesinan, extorsionan, secuestran y tienen presa del terror -y del síndrome de Estocolmo- a la sociedad vasca y a la España toda, cuentan con el apoyo irreductible del gobierno zapateril, de sus socios republicanos y coleguillas separatistas. Y ahora también de la kultureta que -extasiada con la posibilidad de salir en los medios "como sea"- ignora a las víctimas y alienta a los asesinos.
Los señores del terror, los asesinos de niños, los homicidas por control remoto hablan ahora de un proceso de "paz". Una paz que los euskonazis no buscan ni desean realmente. Porque son vulgares mercaderes de la muerte, que ni se arrepienten ni han abandonado las armas, ni piensan hacerlo.
Y la estúpida kultureta los aplaude y jalea como si en lugar de asesinos sanguinarios, estuviéramos frente a Gandhi.
Las "actrices" montan una puesta en escena vergonzante en la que regalan rosas blancas enrojecidas por la sangre de las víctimas y la rabia de sus verdugos, para conmemorar que los asesinos hayan dicho "vamos a dejar de matar por un rato si nos dais todo lo que exigimos". Pero jamás ofrecieron una rosa blanca -ni roja, ni nada- a las víctimas de ETA. Ni un gesto de cariño, ni tan siquiera de compasión. Sin embargo, ahora salen a la calle con sus flores manchadas de sangre inocente en el nombre de la "paz" que supuestamente nos ofrecen los euskonazis.
La única paz que estos euskonazis conocen es la paz de los cementerios donde descansan sus víctimas, que es la misma paz que prometen a todos aquellos que no comparten sus trasnochadas ideas y sangrientos métodos.
Qué diferencia abismal hay entre aquella heroica "Rosa Blanca" de libertad y estas rosas de muerte, teñidas con la sangre de los inocentes...
5 Comments:
interesante historia sobre La Rosa Blanca alemana. No la conocía.
Gracias.
La historia de la Rosa Blanca siempre me emocionó y estuve esperando impaciente el estreno de la película en su versión actualizada.
Quien no haya visto 'Sophie Scholl' se ha perdido una magnífica lección de cómo se lucha por la Libertad.
Sin embargo, las pedorras $ociata$ no tienen ni idea de qué va luchar por todos y únicamente piensan en el sobre de dinero público que les van a pasar por sus acciones de payasas.
En verdad, buscan que los asesinos se vayan DE ROSITAS.
Ya lo comenté también en la bitácora de Libertad Digital.
Es una vegüenza que las actrices "neofas" (neofas=neofascistas) hallan mancillado el símbolo de la "rosa blanca". Un símbolo de la resistencia contra Hitler. Un símbolo de la resistencia contra la ideología que ellas profesan.
esas mujeres del no a la guerra y sus payasadas para conseguir audiencia.
No dijeron nada del envío de tropas españolas a Afganistán. Ni del Cougar.
Pero regalan rosas por la paz de los nazis terroristas.
Señoras, os habéis retratado.
Tampoco tiran rosas blancas al mar por los miles de inmigrantes que están muriendo ahogados intentando llegar a la tierra prometida, ni ponen rosas en las tumbas de los asesinados por ETA, ni [.....] y eso hablando de aquí, que si nos acordamos de todo lo que apoyan desde aquí y genera dolor y miseria, como los asesinados o torturados por Fidel Castro, entonces si que no acabamos nunca.
Publicar un comentario
<< Home